5 adaptaciones para el panda
Escrito por Kelly Kaczmarek ; última actualización: February 01, 2018El panda gigante pasa la mayor parte de su tiempo buscando y comiendo bambú. Usa el resto de su día para descansar. Debido a que los pandas gigantes no hibernan como los otros osos, sus adaptaciones genéticas son muy importantes para su supervivencia. Ellas le permiten buscar forraje con facilidad, consumir y digerir el bambú, ya que el panda gigante tiene que buscar comida durante todo el año.
El "sexto dedo" del panda gigante
Aunque el panda gigante tiene los cinco dedos de los pies que uno esperaría encontrar en la pata de un oso, han desarrollado un "sexto dedo", que ayuda a que agarre mejor el bambú al comer. El "sexto dedo" se origina en el hueso de la muñeca, que le da al panda gigante la fuerza adicional necesaria para arrancar los brotes y las hojas de los tallos de bambú. Este dedo extra es crucial para su supervivencia, un 99 por ciento de su dieta se compone de los brotes y hojas de bambú.
Los músculos de la cabeza y la mandíbula del panda gigante
Dado que la planta de bambú es resistente y elástica, el panda gigante tuvo que desarrollar músculos fuertes en sus mandíbulas para poder comerlo. Como resultado, también desarrollaron una cavidad craneal ampliada que cómodamente puede albergar los fuertes músculos mandibulares necesarios para masticar el bambú. Estas adaptaciones le permiten masticar cómodamente durante largos períodos de tiempo, por lo que el panda gigante puede comer tanto bambú como sea necesario para mantener una nutrición adecuada.
Los dientes del panda gigante
Junto con los fuertes músculos de la mandíbula, el panda gigante tiene los dientes adecuados para poder masticar el bambú. A través de los siglos, el oso panda gigante ha desarrollado molares que fueron más suaves y más grandes que los molares de un oso normal. Dado que su dieta se compone principalmente de bambú, a diferencia de otros osos, los pandas gigantes rara vez utilizan sus dientes caninos, ya que muy pocas veces tiene que matar y arrancar la carne de otros animales.
El sistema digestivo del panda gigante
El sistema digestivo del panda gigante tiene que ser lo suficientemente fuerte como para manejar el consumo de bambú. El revestimiento de su esófago se ve reforzado para que las fibras de bambú no puedan atravesarlo en su camino hacia el estómago. El estómago tiene un revestimiento más duro, así como músculos más fuertes, para ayudar con la digestión del bambú duro.
El alto contenido de celulosa hace bajar al bambú a través del sistema digestivo del panda gigante con bastante rapidez, los intestinos acortados que han desarrollado permiten que este paso sea rápido. El colon también se ha modificado para dar cabida a la dieta exclusiva de bambú. Dado que los pandas gigantes no suelen beber agua más de una vez al día, no pasan tan a menudo los residuos como otras criaturas. El colon más grande permite al panda gigante consumir su enorme dieta de bambú al ayudarlo a controlar sus residuos durante largos períodos de tiempo, lo que limita la cantidad de veces que tiene que parar para ir al baño.
Las piernas del panda gigante
Dado que los pandas gigantes pasan gran parte de su vida alimentándose de bambú, sus piernas se han fortalecido con el tiempo para manejar su peso. Un panda gigante puede consumir entre 20 a 40 libras (9,07 a 18 kg) de bambú en un solo día. Los pandas gigantes tienen un peso promedio de 250 libras (113 kg) para los machos y hasta 220 libras (100 kg) para las hembras debido al consumo de bambú. Sus piernas deben ser capaces de soportar este peso a grandes distancias y subir a los árboles altos por un promedio de 10 a 16 horas todos los días, para permitir que el oso panda mantenga los niveles de nutrición adecuados necesarios para su supervivencia.