Las adaptaciones del colibrí abeja
Escrito por Christian Petersen ; última actualización: February 01, 2018Los colibrís abeja, nativos de Cuba, son el pájaro más pequeño del mundo, miden cerca de 2 pulgadas (5 cm) y pesan 0,06 oz (1,7 g). Ellos han hecho una serie de adaptaciones morfológicas como especie durante millones de años, haciéndolos a ellos y a todos los colibrís únicos entre las aves.
Adaptaciones de la cola
Los colibríes abeja, como todos los colibríes, tienen 10 plumas en la cola en vez de las usuales 12. Esto es para ahorrar peso, lo cual conserva energía. Conservar energía es importante ya que los colibríes tienen el ritmo metabólico más alto de todos los animales, y pueden tener un ritmo cardíaco de más de 1200 latidos por minuto. Como en todas las aves, las plumas de la cola actúan como un timón durante el vuelo, pero los colibríes tienen otra adaptación: sus plumas en la cola son capaces de moverse rápidamente hacia arriba o hacia abajo, actuando como un freno, facilitando paradas y arrancadas rápidas mientras el ave está suspendida. Estas plumas en la cola son también muy tiesas, permitiéndole al ave prepararse mientras se eleva.
Adaptaciones de la cabeza
Las adaptaciones en la cabeza de los colibríes abeja los separan de los otros tipos de aves. Sus cabezas son proporcionalmente muy grandes para sus cuerpos y tienen cerebros grandes para su tamaño tan pequeño, permitiéndoles adaptarse a terrenos y situaciones no familiares mientras migran. Sus ojos son grandes y tienen la habilidad de ver en el espectro ultravioleta, lo cual les ayuda a detectar las flores. Muchas flores tienen colores en su espectro que son invisibles a la visión humana, y los colibríes se han adaptado para ver más claramente, ayudándoles a encontrar alimento. Los colibríes abeja han desarrollado picos largos y delgados y una lengua elástica y muy larga para permitirles beber el néctar de la parte profunda de las flores cuando lo necesitan. Su pico también permite que la boca se abra para atrapar pequeños insectos, los cuales son una parte importante de su dieta. Sus caras son aerodinámicas, lo que les permite llegar profundamente en las flores, como también reducir arrastre durante el vuelo. Tienen una buena audición y sus orejas están cubiertas por plumas para evitar que entre polen y suciedad.
Adaptaciones de las alas
Las alas de los colibríes abeja tienen adaptaciones que permiten a las aves pequeñas flotar e incluso volar en reversa o hacia los costados. Sus alas son estrechas y cónicas, y han desarrollando la habilidad de rotar en sus zócalos mucho más que las otras aves. Tienen músculos del pecho increíblemente fuertes para su tamaño y estos músculos pueden mover las alas a un ritmo increíble de 70 a 80 pulsaciones por segundo en los colibríes abeja. Todas las plumas de vuelo de los colibríes son livianas pero muy fuertes para soportar el gran número de veces que se mueven durante el vuelo.
Adaptaciones metabólicas
Los colibríes abeja tienen un ritmo metabólico increíblemente rápido y tienen que comer casi lo que pesa su cuerpo cada día. Han desarrollado la habilidad de entrar en un letargo, o un estado parecido a la hibernación donde su ritmo cardíaco disminuye un poco, lo que les permite descansar por la noche o cuando los suministros de comida son bajos o difíciles de encontrar.