Cómo alimentar un cabrito

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Hemera Technologies/Photos.com/Getty Images

Los cabritos deben alimentarse en los pezones de su madre poco después del nacimiento. Al principio, la hembra dará leche de color amarillo llamada calostro. El calostro proporciona los nutrientes esenciales y anticuerpos, ya que las cabras nacen sin inmunidad a las enfermedades. Si tu cabrito es un huérfano, la cierva no tiene leche o el bebé no es capaz de alimentarse de su madre, tienes que darle de comer con la mano. Después de las primeras tomas de calostro, la leche de cabra cambia a normal o un sustituto de leche.

Calienta el calostro de vaca o de cabra congelado o a 131 grados Farenheit (55 grados Celcius). Mantén esta temperatura durante una hora. Deja que el calostro se enfríe a 100 grados Farenheit y viértelo en un biberón estéril.

Alimenta al cabrito con un mínimo de 40 ml de calostro por kilogramo de peso corporal a más tardar en un par de horas después del nacimiento. Si no se alimenta de la botella, pon el calostro en un gotero estéril e introdúcelo en la boca.

Alimenta al cabrito con la leche de cabra pasteurizada entera o un sustituto de leche de cabra durante al menos las primeras dos a cuatro semanas. Ofrécele leche tres veces al día. Si es débil, dale menos leche con más frecuencia. Los cabritos en general, consumen del 10 al 15 por ciento de su peso corporal cada día.

Pasteuriza leche entera de cabra al calentarla a 165 grados F durante 15 segundos y luego ponla en un biberón estéril. También puedes utilizar un sustituto de la leche.

Ofrécele a la cabra la boquilla de la botella. Puede tomar varios intentos antes de que el animal empiece a succionar. Desliza tu cara contra su mejilla y acaríciala entre los ojos y la nariz para estimular el reflejo de succión.

Sostén al cabrito en tu regazo si es que todavía se niega a comer. Esto puede ayudar a que el animal se sienta más seguro. Cubre su cara con una toalla y frota el cuello mientras colocas la botella en su boca.