Cómo blanquear madera de pino

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Si bien el color del pino es naturalmente hermoso, puede que desees blanquearlo. Las tablas de pino varían en color, lo cual es adecuado para realizar ciertos proyectos. Blanquear tablas de madera de pino asegura que todas sean idénticas, lo que le dará a la madera una apariencia consistente. El blanqueado retira las manchas de pegamento, manchas de hierro y otras decoloraciones del pino. Cualquiera sea el propósito de realizar el blanqueado, utiliza la técnica adecuada para asegurarte de tener el mejor resultado.

Remueve cualquier barniz existente o acabado de la madera. Colócate protección en los ojos y guantes resistentes a químicos. Sumerge un removedor de pintura en un pincel desechable. Retira todo el barniz suavizado con un raspador, una vez que el removedor haya actuado el tiempo necesario. Raspa la laca y las terminaciones con una esponja de acero sumergida en alcohol desnaturalizado.

Satura un trapo con agua. Enjuaga el pino hasta que esté libre de removedor de pintura o alcohol desnaturalizado. Deja que la madera seque al aire libre.

Mezcla partes iguales de peróxido de hidrógeno e hidróxido de sodio de un sistema de blanqueador de madera de dos partes. Mezcla los químicos en un balde plástico y utiliza sólo la cantidad que planeas aplicar inmediatamente en el pino. Sigue las instrucciones del sistema blanqueador.

Esparce la mezcla de blanqueado sobre el pino con una esponja. Aplica la mezcla de forma suave y pareja, cubriendo todo el pino. Deja que la mezcla se asiente en la madera por todo el tiempo que lo recomienden las instrucciones del blanqueador.

Satura un trapo con agua tibia. Utilízalo para enjuagar meticulosamente la mezcla de peróxido de hidrógeno y el hidróxido de sodio del pino.

Naturaliza lo que haya sobrado de la mezcla de peróxido de hidrógeno e hidróxido de sodio con una solución de una parte de vinagre por dos partes de agua. Frota la solución de vinagre en el pino con un trapo limpio.

Sumerge otro trapo en agua tibia. Limpia el vinagre del pino, enjuagando meticulosamente la madera.

Deja que el pino seque al aire libre por 24 horas. Una vez esté seco, inspecciona el color. Si la tonalidad no es tan clara como lo deseas, repite el proceso.

Lija el pino ligeramente cuando logres la tonalidad deseada. Frota un papel de lija de graduación 400 sobre el pino para alisar la superficie y remover cualquier rastro de madera áspera.