Cuáles son los propósitos fundamentales de la educación

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Uno de los propósitos principales de la educación es que los individuos conozcan todo su potencial como seres humanos y habitantes de una sociedad y del mundo. Nuestras decisiones personales y profesionales se guían por la calidad de educación que recibimos. Asimismo, la salud de nuestra sociedad y de nuestro planeta dependen del razonamiento, los valores y la habilidad para tomar decisiones que podemos aportar como ciudadanos, legisladores, jueces y líderes.

Desarrollo social y económico

Desde el punto de vista de la sociedad, uno de los propósitos más imperiosos de la educación es facilitar el desarrollo social y económico. Una comunidad de personas habilidosas, cultas y capaces tiene más posibilidades de vencer los problemas de pobreza e injusticia social que acosan a muchas naciones en vías de desarrollo. La educación puede proporcionar oportunidades para obtener un ascenso social y económico, sistemas sustentables, inclusión social y la implementación de los cambios necesarios.

Forjar el carácter

Inculcar valores sociales y éticos en los estudiantes es una tarea que comparten las instituciones educativas y los padres. Los individuos y las sociedades se enfrentan con un mundo con una violencia interpersonal y global creciente provocada por varios factores, como el estrés económico y la competencia, las discrepancias entre las culturas e ideologías, el racismo y otros problemas. Un sentir fuerte de los valores y la ética social basado en la comprensión de las fuerzas constructivas y destructivas que obran en toda sociedad puede ayudar a construir estabilidad en el individuo y en su comunidad.

Lograr solidaridad social basada en el respeto de las diferencias

Tal vez el mayor propósito de la educación es permitirle a la gente crear una unidad en un mundo de diferencias. Una democracia verdaderamente representativa no le entrega los poderes y derechos especiales para la toma de decisiones a unos pocos individuos conocedores de política y privilegiados económicamente. Las resoluciones y las soluciones inevitablemente fallarán, ya que algunas personas están excluidas del proceso de solución de problemas y creación de soluciones. Todas las sociedades del mundo se están volviendo más pluralistas, no menos. Se pueden encontrar soluciones que beneficien a todos, no sólo a unos pocos.

Permitirle a los ciudadanos enfrentarse con los desafíos de vivir en democracia

La educación debe ayudar a quienes aprenden a estar más conscientes de las condiciones de sus vidas y de la sociedad. También debe enseñarles las habilidades sociales, intelectuales, prácticas y científicas necesarias para planificar, ajustarse y generar cambios. Debe inculcar un compromiso para dar un paso al frente y defender el bien común y la disposición para ingresar al ámbito público para debatir problemáticas éticas y políticas. Debe enseñar habilidades analíticas para la toma de decisiones y la implementación de ellas, para responder a las problemáticas sociales y los desafíos.

Para enfrentar las demandas tecnológicas de un mundo cambiante

Nuestro mundo cambia constantemente y nos presenta nuevos desafíos tecnológicos cada día. Un propósito fundamental de la educación es exponer a quienes aprenden a las habilidades científicas y analíticas necesarias para comprender, construir tecnologías nuevas e innovar, desde la arquitectura eficiente a nivel energético hasta la posibilidad de proveer agua potable y servicios sanitarios para los millones de personas que viven sin ellos.

Para mejorar la calidad de vida de uno mismo

Aristóteles creía que era necesaria la presencia de aptitudes estéticas, intelectuales y morales para que un ser humano prosperara y fuera feliz, y estos son todos productos de la educación. Un propósito importante de la educación es ayudar a la gente a describir y saber el tipo de mundo en el que quieren vivir. Este proceso los conectará inevitablemente con las necesidades y requerimientos de la comunidad y del mundo en el que viven.