Las desventajas de los hongos

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Los miembros del reino Fungi incluyen hongos comestibles y venenosos, mohos que le dan sabor a los quesos, la levadura que fermenta los panes, los medicamentos como la penicilina y los organismos que causan enfermedades humanas. A pesar de que se parecen mucho a las plantas, los hongos no pueden fabricar su propio alimento, sino que se alimentan de organismos muertos o actúan como parásitos. Los hongos primero digieren su alimento fuera de sus cuerpos antes de ingerirlos. Algunas especies de hongos comprenden dos formas: una forma de levadura encerrada en cápsulas a temperatura ambiente y una forma de moho hecha de estructuras filiformes a temperaturas corporales. Los medicamentos que tratan las infecciones por hongos alteran las funciones importantes de la célula fúngica, como la producción de la pared celular.

Mohos comestibles

Los mohos se forman en ambientes húmedos. Se componen de partes visibles llamadas tallos, apéndices filiformes que anclan el moho, y las esporas que se adhieren al tallo. Las esporas, las estructuras reproductivas del moho, son aéreas. Las esporas, cuando se inhalan, causan problemas respiratorias y disparan alergias. Algunos mohos producen venenos, o micotoxinas, como la aflatoxina, un agente causante de cáncer. Los mohos se forman en los alimentos y se aferran a los interiores del refrigerador y a utensilios de limpieza. Para mantener la exposición al moho al mínimo, cubre y refrigera los alimentos inmediatamente, consume las sobras dentro de unos días y evita la inhalación de elementos con moho.

Hongos venenosos

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Ciertos hongos venenosos se parecen mucho a los comestibles y pueden engañar al colector de setas aficionado, llevándolo a una muerte casi segura, incluso si ingiere una pequeña cantidad. Los hongos del grupo de Amanita, como el ángel exterminador y la tapa de la muerte no tienen antídoto, causando la muerte por insuficiencia hepática y renal. Las morillas falsas tienen un parecido notable a las morillas verdaderas comestibles, pero las morillas falsas trastornan el sistema digestivo y, ocasionalmente, causan la muerte. Otras especies de hongos dañinos pueden causar sólo molestias gastrointestinales o alucinaciones.

Infecciones superficiales y subcutáneas

Los hongos pueden infiltrarse en las capas externas de los cuerpos humanos y causar picazón y erupciones cutáneas. Varias condiciones comunes con hongos tratables afligen a la piel humana, cabello y uñas. La tiña causada por varias especies de tiña pueden afectar la cabeza, tronco y extremidades; el pie de atleta ocurre cuando la tiña llega a los pies. El piedra negra produce ronchas negras en el tallo del pelo. Las infecciones por hongos de las uñas de los pies, o onicomicosis, nacen de las infecciones del pie. Estas infecciones por hongos se extienden desde un objeto o persona infectada. Mantener las partes del cuerpo secas y frescas ayuda a prevenir infecciones fúngicas superficiales.

Las micosis sistémicas

Cuatro especies de hongos: Coccidioides immitis, Histoplasma capsulatum, Paracoccidioides brasiliensis y Blastomyces dermatitidis; característicamente producen esporas que dan lugar a las micosis sistémicas, infecciones por hongos que afectan a más de una parte del cuerpo. En individuos sanos, la infección o bien no produce síntomas o desaparecen por sí mismas. En las personas con sistemas inmunes comprometidos y en personas muy jóvenes o muy viejas, la inhalación de esporas de hongos produce una enfermedad muy extendida en varios órganos a la vez y puede causar la muerte. El tratamiento generalmente incluye medicamentos antimicóticos, la anfotericina B.

Efectos de los hongos en otros organismos

Más de 8000 especies de hongos infectan a las plantas, por lo que los hongos son los patógenos más comunes de las plantas u organismos causantes de enfermedades. Estas especies parasitarias hacen que las frutas y vegetales no sean comestibles, las tornan de color amarillo y a veces matan a toda la planta. Las enfermedades fúngicas de las plantas dan lugar a pérdidas económicas para la industria agrícola y la escasez de alimentos de origen vegetal para consumo humano y animal, que afectan a las plantas antes o después de que se cosechan. Por la alteración genética y la susceptibilidad de las plantas a las enfermedades de hongos, el uso de fungicidas y el aislamiento de las plantas infectadas, los botánicos esperan mejorar los efectos de las enfermedades fúngicas.