Famosos monólogos en obras de teatro
Escrito por Mike Koehler ; última actualización: February 01, 2018
Un gran monólogo puede darle a una obra de teatro un lugar destacado en la historia. Pero combinar una escritura convincente con la posibilidad de colocar a un solo actor en el centro de la atención, hace que los monólogos se conviertan en la memorable piedra angular en una obra. Si bien Shakespeare tiene su lugar dentro de los monólogos famosos, hay otras obras de teatro más modernas que también se han ganado su lugar en la historia del arte dramático.
"Hamlet" de William Shakespeare
El parlamento más famoso de la más famosa obra del dramaturgo más famoso del mundo: eso es el monólogo de Hamlet. Mejor conocido por la línea con la que parte: "Ser o no ser", el discurso de Hamlet en el Acto 3, Escena 1, lo tiene él contemplando su vida triste y tratando de decidir si la muerte sería una salida más fácil. Hamlet no está solo en el escenario, ya que Ofelia lo mira a medida que él avanza a través de su emotivo discurso.
"Julio César" de William Shakespeare
Marco Antonio ofrece un panegírico de Julio César en la obra de Shakespeare sobre el asesinato del líder romano. Se pone de pie frente a una multitud que se ha reunido para escucharle y seguir su consejo sobre qué hacer con los asesinos que han matado a su líder. Se dirige a ellos directamente con la famosa primera línea: "Amigos, romanos, compatriotas, prestadme vuestros oídos." Antonio va a sacar de quicio a la multitud llamando sarcásticamente a los asesinos "honorables".
"Algunos hombres buenos" de Aaron Sorkin
Mientras muchos recuerdan la frase de la película: "¡No se puede manejar la verdad!", de la adaptación cinematográfica de "Algunos hombres buenos", el monólogo más famoso en esta obra de teatro es la que viene antes de esas palabras, cuando Kaffee estaba interrogando al coronel Jessep. La pasión detrás del cambio es el punto de quiebre emocional de la película, cuando Kaffee dice: "Usted tiene una responsabilidad más grande de la que podemos imaginar. Usted nos proporciona una manta de la libertad". Las palabras de Aaron Sorkin fueron añadidas y embellecidas por William Goldman en la película.
"Muerte de un vendedor viajero" de Arthur Miller
El monólogo más famoso en la obra maestra de Arthur Miller no proviene del protagonista Willy Loman, sino de su esposa, Linda. Linda castiga a sus hijos por que no hacen caso a su padre y porque lo ven como un hombre pequeño. Sus líneas famosas son: "Willy Loman nunca hizo mucho dinero. Su nombre nunca salió en el periódico. Él no es el mejor personaje que jamás haya existido, pero él es un ser humano, y algo terrible le está sucediendo. De modo que tienen que prestarle atención."
