Formas de sostener un libro abierto con una sola mano
Escrito por Pablo Gowezniansky ; última actualización: February 01, 2018Los libros son fieles compañeros que nos acompañan a donde vayamos. Pero te sucederá que viajas en un transporte lleno, y con una mano tienes que sujetarte y sólo dispones de una libre para tomar el libro. ¿Qué hacer entonces? No te preocupes, hay maneras muy eficientes de continuar disfrutando del placer de la lectura disponiendo de solo una mano. En poco tiempo te resultará tan cómodo que lo harás de forma automática.
Tener un libro a mano
Sin importar cuánto avance la tecnología, los libros en formato físico parecen nunca pasar de moda. Disponer de un libro cuando sales es como si tuvieras un amigo junto a ti en todo momento. Siempre que lo necesites, puedes extraerlo para sumergirte en sus páginas y abstraerte de lo que sea que esté sucediendo. Si bien los tiempos modernos están llevando a un boom del formato audiovisual, la industria del libro está vivita y coleando y tan presente como siempre.
Las ventajas de leer
Leer es una actividad que ejercita tu concentración, estimula tu sinapsis neuronal y te mantiene en un constante estado creativo. Al leer estimulas tu imaginación; esas letras que atraviesas con los ojos se construyen en sentidos con imágenes que tu cerebro va procesando a cada momento. Si bien leer puede parecer una actividad pasiva, tu cerebro está constantemente activo decodificando esas palabras, uniendo sus sentidos y construyendo imágenes, personajes y diálogos a cada instante. Si quieres estar mentalmente activo, nunca olvides de cargar con un libro de tu autor favorito.
Con el pulgar
Esta posición es cómoda para cuando tienes un libro pequeño en la mano. Tienes que disponer tu dedo pulgar en el medio de ambas páginas. Con la parte media e inferior del mismo, sostienes su página derecha; con la parte superior del dedo presionas sobre la página izquierda. De esta manera, si encuentras la ubicación exacta, tu libro se mantendrá bien abierto con una sola mano. En la parte trasera dispondrás del resto de los dedos. Será especialmente el dedo índice el que realice una presión hacia ti, mientras el dedo pulgar hace una presión hacia el dedo índice. Este magnetismo de presiones ayudará a que el libro esté fácilmente abierto.
Con el pulgar y el anular
Cuando tienes un libro más grande, éste es un buen método para ayudarte a mantenerlo abierto. Si bien al comienzo puede resultar una posición extraña y hasta cansadora, una vez que te habitúes no te requerirá ningún esfuerzo y podrás mantenerla el tiempo que lo desees. Con el dedo anular sostienes la página izquierda y con el dedo pulgar sostendrás la página derecha. El dedo del medio y el dedo índice estarán sosteniendo la parte trasera. El meñique no lo tendrás que utilizar. Verás cómo con esta disposición de la mano, leer se vuelve cómodo y agradable.
Desde arriba
En esta posición tendrás el brazo más extendido y lo llevarás más alto. Por eso, es susceptible de que te canses más rápido. Aunque en el caso en que te acostumbres, podrás mantener esta postura con sencillez. Tienes que utilizar el músculo que se encuentra debajo del dedo pulgar para sostener la hoja derecha y el dedo pulgar para sostener la izquierda. En la parte de atrás, la falange inferior del dedo índice estará haciendo presión hacia ti, desde el lado derecho trasero del libro, para que la página pueda mantenerse abierta. Con esta presión desde el lado derecho delantero, izquierdo delantero y derecho trasero, lograrás un equilibrio perfecto para mantener tu libro abierto sin problemas.
Consideraciones
Estas consideraciones fueron hechas teniendo en cuenta que tu mano hábil sea la derecha. Pero si te resultara más cómodo con la izquierda, entonces la disposición de los dedos será la misma, sólo que del lado contrario. Deberás dar vuelta las indicaciones; por ejemplo, en lugar de con el dedo pulgar tomar la página derecha y con el anular la izquierda, tomarás con el pulgar la página izquierda y con el anular la derecha.