Cómo funciona el ventilador eléctrico de un automóvil

Montaje

La mayoría de los ventiladores eléctricos se montan directamente en el propio radiador y contienen su propia rejilla para una máxima refrigeración. Los ventiladores de fábrica suelen estar atornillados usando una variedad de soportes para el montaje, y los accesorios genéricos para vehículos que no cuentan con un ventilador eléctrico de fábrica utilizan una sistema de montaje con una cremallera especial de ajuste diseñada específicamente para aplicaciones de radiadores. Si el ventilador eléctrico está montado en el lado del motor del radiador (o la parte posterior), entonces es un ventilador extractor, lo que significa que extrae el aire a través de la rejilla y sobre el núcleo del radiador. Si el ventilador está montado en el lado de la rejilla del radiador (o afuera), entonces es de aire forzado y desplaza el aire sobre el núcleo de esa manera. Los ventiladores de aire forzado suelen ser más eficientes, pero debido a problemas de espacio en los compartimientos del motor o a la colocación de ventiladores impulsados a motor, puede ser necesario uno extractor. Algunos vehículos utilizan una configuración de doble ventilador para un máximo flujo de aire.

Cableado

Debido a la naturaleza de un ventilador eléctrico, éste debe utilizar electricidad para poder funcionar. En una aplicación de vehículo, se hará uso del sistema de 12 voltios para alimentar su motor. El ventilador tendrá al menos un cable positivo y uno negativo saliendo del motor. Algunos ventiladores funcionarán al revés si se invierte el cableado, por lo tanto asegúrate de que estén conectados en los terminales correctos. Los ventiladores de fábrica funcionarán a través de un arnés de cableado y, muchas veces, estarán conectados a los controladores termostáticos, mientras que los genéricos están a veces simplemente conectados a un interruptor de palanca en el compartimento del pasajero para que el conductor decida cuándo encenderlo o apagarlo.

Controles termostáticos y aire acondicionado

Los ventiladores eléctricos de fábrica suelen estar enganchados en una especie de termostato que se enciende sólo cuando el motor alcanza una determinada temperatura preestablecida en el mismo. Los ventiladores de fábrica también se encienden cada vez que se utiliza el aire acondicionado para asegurar que la carga adicional de usar el compresor no incremente de manera indebida el calor del motor. Algunos ventiladores genéricos están disponibles con termostatos, y algunos incluso pueden ser programados por el propietario para el encendido y apagado cada vez que se llegue a una cierta temperatura. Si el ventilador eléctrico no se enciende cuando el acondicionador de aire se activa, puede haber un problema con el controlador o con el cableado, o incluso con el el motor del ventilador. Es posible realizar pruebas en el ventilador mediante la conexión de los cables negativos y positivos directamente a la batería durante un minuto para ver cómo funciona. Si el ventilador se enciende y se mantiene a una velocidad constante, el problema probablemente estará en el termostato o en el cableado.