La historia del casete
Escrito por Dennis Hartman ; última actualización: February 01, 2018El casete compacto, comúnmente conocido como cinta de casete, fue una tecnología de grabación importante durante todo gran parte del siglo 20. Se introdujo a principios de 1960 y se han usado para una gran variedad de propósitos. Así como el casete proporcionó una ventaja tecnológica sobre sus antecesores, la nueva tecnología hizo que desde el siglo 21, el casete sea algo obsoleto.
Tecnología
El casete compacto es un estuche de plástico que contiene un carrete de 3,81 mm de cinta magnética entre dos rieles. La cinta corre a una velocidad de 4,76 centímetros por segundo. La cabeza de la cinta en el reproductor o en la cubierta, en contacto con una porción expuesta de la cinta, interpreta una señal analógica desde la superficie magnética de la cinta. El casete compacto es esencialmente un equipo autónomo de sistema carrete-a-carrete, que usa una tira estrecha de la cinta y que encierra las bobinas dentro de la carcasa de plástico. Cuando apareció por primera vez en el mercado, la capacidad de almacenamiento y la calidad de sonido de audio codificada en cintas de casetee era bastante pobre debido a su pequeño tamaño, pero la evolución de codificación analógica dio lugar a grandes mejoras en la vida de la tecnología.
Introducción
El casete compacto fue presentado como un producto de marca de la firma electrónica, holandesa, Philips. Durante 1963 y 1964, Philips lanzó la cinta de cassette como medio de grabación de sonido para los mercados norteamericanos y europeos. El casete compacto fue comercializado inicialmente como un medio para la grabación de dictado personal, pero las mejoras tempranas en la calidad del audio llevó a los creadores a creer que el casete era una alternativa viable a los discos de vinilo. La licencia de Philips Compact Cassette para con las empresas electrónicas era de forma gratuita y la popularidad de la cinta comenzó a despegar. En 1971, se descubrió un nuevo proceso para el uso de dióxido de cromo en la superficie de la cinta. El salto en la calidad resultante, condujo al casete a convertirse en un nuevo estándar para la industria discográfica.
Popularización
En la década de 1980, Sony comenzó a comercializar su reproductor de casetes portátil, el Walkman, en todo el mundo. Esto llevó a una explosión en la popularidad del casete. Las radios de los coches con platinas para casetes, se convirtieron algo estándar, suplantando a la corta duración de 8 pistas. Las cintas de casete se convirtieron en el audio estándar para el hogar y los discos de vinilo rápidamente desaparecieron de los estantes de los vendedores de música.
Otros usos
Además de servir como un medio de grabación de audio, el casete compacto tenía un número de otras aplicaciones. Debido a que una sola cinta puede ser re-grabada muchas veces, se convirtió en el medio de elección de los primeros contestadores telefónicos. Los casetes también fueron producidos para poder ejecutar un bucle continuo, lo que los hace ideales para las aplicaciones comerciales tales como la música que se reproduce por los altavoces en las tiendas minoristas. Algunos fabricantes de computadoras de escritorio, utilizaban la cinta de casete como medio de almacenamiento de datos. Apple y Hewlett Packard ofrecían las computadoras con unidades de cinta incorporadas.
Rechazo
El casete compacto siguió siendo popular hasta que la tecnología digital avanzó en la década de 1990. Los equipos domésticos con disco duro (así como unidades CD-ROM y disquetes) hicieron que el uso del almacenamiento de datos del casete fuera innecesario. El disco compacto, que se produce desde 1982, finalmente se convirtió en algo lo suficientemente económico para competir directamente con el casete. Su capacidad más grande y la capacidad de hacer copias digitales sin perder calidad, condujo a los consumidores a preferir el disco compacto, dejando al casete compacto detrás, como una tecnología obsoleta.