Cómo hacer el modelo de un cerebro para un proyecto escolar

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Hemera Technologies/PhotoObjects.net/Getty Images

Crear el modelo de un cerebro para un proyecto escolar puede ser educativo y entretenido. Puedes tomar esta oportunidad para enseñarle a tu hijo sobre el cerebro mientras pasan tiempo juntos disfrutando esta actividad creativa. Elegir un modelo que requiera tiempo en la cocina ayudará a desarrollar las habilidades de tu hijo de ciencia y cocina a la vez. Incorpora elementos educativos en esta actividad, como discutir las variadas partes del cerebro y la diferencia entre el hemisferio derecho y el izquierdo.

Pon 2 tazas de agua, 2 de harina, 1 de sal y las 4 cucharaditas de crema tártara en la licuadora. Mezcla a velocidad media hasta que la preparación esté suave. Si no tienes una licuadora, puedes usar un gran pocillo y batir para combinar los ingredientes. Cuando estés haciendo la mezcla, conversa con tu hijo sobre la función principal del cerebro como el centro de nuestro sistema nervioso central, que controla el comportamiento del cuerpo y nos ayuda a aprender y comprender el mundo a nuestro alrededor.

Vierte 1/4 de taza de aceite vegetal en la licuadora. Sigue mezclando hasta que el aceite esté bien combinado. Si no tienes aceite vegetal, puedes usar otros tipos de aceite de cocina. El vegetal ayudará a que la mezcla no sea tan dura.

Pon la preparación en una sartén grande. Pon el hornilla a fuego bajo y cocina. Habrás terminado cuando la mezcla comience a verse con bultos.

Saca una gran hoja de papel encerado y pon la mezcla cocinada sobre ella. Deja que la preparación se enfríe antes de tocarla.

Amasa con suavidad la mezcla, dándole forma gradualmente como la del cerebro. Usa una ilustración de un cerebro como modelo. Usa las puntas de tus dedos para poner más arrugas que representen las circunvoluciones o hendiduras de la corteza cerebral. Usando un cuchillo de mantequilla agrega una línea sutil en el medio del cerebro para separar los hemisferios. Explícale a tu hijo que el lado izquierdo del cerebro es más racional y analiza con cuidado las decisiones, mientras que el derecho es más creativo e intuitivo.

Agrega los colorantes para representar las distintas partes del cerebro, usando un color distinto para cada sección. Por ejemplo, puede que uses el rojo para representar el centro visual, naranjo para el auditivo y azul para el lóbulo frontal. Con los niños más grandes, cerca de 9 o 10 años de edad, puedes conversar sobre las partes más pequeñas del cerebro también, como el área Broca y el campo del ojo frontal.