Cómo pintar pisos laminados

Los pisos laminados suelen colocarse en áreas con mucho tráfico, incluyendo los espacios de cocina, baños y entradas, o alrededor de ellos. Con el tiempo, este desgaste puede hacer que el laminado se vea áspero y maltratado. Una solución barata y fácil de prolongar la vida de tus pisos laminados es pintarlos con pinturas para el hogar. El beneficio extra es que existen muchos colores para elegir cuando se trata de pintar y no necesitas contratar a un profesional para realizar esta tarea.

Lija ligeramente los pisos con papel de lija. Esto permite que el imprimador y la pintura se adhieran mejor.

Barre el polvo y limpia el piso con una toalla o un trapo húmedo. Deja que el piso se seque completamente.

Cubre con cinta de pintor las paredes para prevenir que se manchen con pintura.

Aplica una capa de imprimador con un rodillo y deja que se seque completamente. Aplica una segunda capa y deja que se seque. Usa pinceles para las esquinas o las áreas más pequeñas y detalladas. Asegúrate de que la habitación esté bien ventilada para acelerar el proceso de secado.

Pinta el piso laminado con un rodillo limpio. Deja que se seque y aplica una segunda capa. Nuevamente, deja que se seque antes de seguir.

Aplica una capa de un sellador de poliuretano para sellar el piso y hacer que dure por más tiempo. Antes de colocar los muebles en la habitación, espera a que el sellador se haya secado completamente.