Los pros y los contras de la pesca comercial
Escrito por Joe Fore ; última actualización: February 01, 2018La pesca comercial se refiere a una serie de actividades que usa redes, líneas o trampas para capturar animales marinos para la venta. Si bien es una actividad económica de enorme importancia, la sobrepesca ha llevado a un agotamiento de las poblaciones de peces en todo el mundo, poniendo en peligro la viabilidad de la industria. A pesar de los esfuerzos para frenar la sobrepesca, el cambio climático puede exacerbar los problemas de la disminución de las poblaciones de peces.
Tipos
El término "pesca comercial" en realidad se refiere a una gama de diferentes técnicas utilizadas para capturar la vida marina. Una forma consiste en utilizar un anzuelo para atrapar peces, al igual que en la pesca tradicional y recreativa. Una variación de este método, llamado "palangre", involucra ensartar a cientos o miles de peces a lo largo de una sola línea, que puede extenderse por millas. Otros métodos de pesca comercial incluyen el uso de redes para dragar el agua para los peces, o las trampas, las cuales pueden ser utilizadas para la captura de peces, anguilas y crustáceos, como cangrejos y langostas.
Pros
Las dos ventajas más obvias de la pesca comercial son: 1) que alimenta la demanda mundial de productos del mar, y 2) que tiene un gran impacto económico en el PIB mundial. La demanda mundial de pescado es muy alta, especialmente en los países del Pacífico, donde sus ciudadanos obtienen entre el 25 y el 69 por ciento de las proteínas animales a partir de los peces. Como resultado, la pesca comercial es una actividad económica importante, que emplea a más de 200 millones de personas en todo el mundo, generando más de US$80 mil millones al año.
Contras
Por el momento, la mayor preocupación por la pesca comercial se debe a la importante influencia que tiene sobre la ecología de los océanos. Las Naciones Unidas y países de todo el mundo están cada vez más preocupados por la disminución de las poblaciones de peces del mundo. La Organización de Alimentos de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO por sus siglas en inglés) estima que más del 70 por ciento de las especies de peces del mundo están "agotados" o "explotados plenamente". Las reducciones de algunas especies, como el atún rojo gigante, pez espada, merluza, bacalao y platija, han sido particularmente severas. Además de agotar las especies objetivo, la pesca comercial que utiliza redes o trampas sin darse cuenta puede capturar y matar a otros animales marinos, incluyendo tortugas, delfines o tiburones.
Regulaciones internacionales
En un esfuerzo por frenar el agotamiento de valiosos recursos marinos, la comunidad internacional ha hecho serios esfuerzos recientes para armonizar las normas que regulan la pesca comercial. Los buques pesqueros que pescan en "alta mar" (definido como más de 200 millas (321,86 km) de la costa de cualquier país) están libres de pesca sin regulaciones. Sin embargo, en respuesta a la escalada de las tensiones entre las flotas pesqueras de diferentes países, la Convención de las Naciones Unidas de 1982 sobre el Derecho del Mar estableció "zonas económicas exclusivas" (ZEE), que le dieron a los países ribereños derechos económicos exclusivos sobre las aguas hasta 200 millas fuera de sus costas.
Perspectivas para el futuro
Si bien la comunidad internacional ha tomado medidas para reducir la sobrepesca, el futuro de la pesca comercial sigue siendo incierto. Una correcta gestión ha permitido que algunas poblaciones de peces se recuperen, pero otras siguen disminuyendo. Estos problemas podrían ser exacerbados por el cambio climático global, lo cual puede alterar los patrones de migración y desove. Además, el aumento de los niveles de dióxido de carbono puede aumentar la acidez del agua de mar, lo que podría inhibir la formación de los arrecifes de coral, un impacto negativo en las poblaciones de peces.