Cómo reparar un arco de violín

Escrito por Erika Geiss ; última actualización: February 01, 2018
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Poner el pelo es la reparación más común en un arco de violín. Otras, como una cámara incorrecta (doblada a la mitad de la varilla), grietas en la madera debido a la temperatura o a los cambios de humedad, piezas agrietadas o que faltan del arco deben llevarse a un luthier profesional. Aunque es mejor ir a un luthier para cualquier reparación/restauración de arco necesaria, saber qué entra en la reparación y en la restauración puede ayudarte a conocer qué buscar y qué esperar de ello.

Quita el pelo restante en el arco.

retro violin close-up image by Maxim Petrichuk from Fotolia.com

Quita la cuña de virola en la rana con la ganzúa metálica. Insértala suavemente entre la rana y la cuña y haz palanca.

Enrolla la banda metálica en la rana con una tela fuerte o con cuero, agárrala con alicates y saca suavemente la tuerca metálica y el pelo. Saca el deslizamiento metálico de la base de la rana.

Quita el nudo de pelo de dentro de la caja (o canal) en la tuerca de rana, levantándolo. Quita el tornillo del extremo, sacando la tuerca de la varilla por completo. Ponlos a un lado.

Quita la punta del arco con cuidado y desliza hacia fuera el nudo de pelo. Deshazte del pelo viejo.

Coloca el arco en la sujeción de rana y asegúralo con las pinzas de tornillo. Limpia el tornillo del extremo, el deslizamiento, la horquilla del extremo y la banda metálica (de forma alternativa, la banda puede tirarse y reemplazarse por otra). Quita todos los restos de pegamento viejo con el limpiador y usa el pulidor para sacar brillo a las piezas.

Reemplazar el pelo del arco

Inspecciona y mide los pelos de caballo. Mide la longitud y la anchura de pelo necesarios usando el medidor; deja como dos pulgadas ( 5 cm), más en cada extremo de la varilla para asegurarte de que hay pelo suficiente para el tamaño del arco y para meter bien en la cámara. Asegúrate de que el pelo es dorado, amarillo o color caramelo, no blanco.

Sostén un extremo de los pelos juntos. Toma de seis a siete pulgadas (15-17,5 cm) de hilo encerado o de alambre e inserta como una pulgada (2,5 cm) en un extremo de los pelos unidos, enrollando el alambre restante o el hilo encerado alrededor de los extremos. Ata el hilo o el alambre. Quema los extremos de los pelos cerca del extremo atado usando una lámpara de alcohol. En el mismo extremo, haz un pequeño nudo. Usa el alicate paralelo para tensar el nudo y aplanarlo si es necesario.

Pon el nudo de pelo dentro de la caja de la punta del arco. Usa una ganzúa metálica para asegurar el pelo en el agujero. Ponlos todos juntos, asegurándote de que queden planos y paralelos. Vuelve a unir la punta del arco (ésto puede requerir algo de pegamento).

Peina los pelos para suavizarlos. Enróllalos alrededor de tu mano y mételos en un cuenco de agua templada, con cuidado de no mojar la punta de la varilla. Desenrolla los pelos y ponlos planos, secándolos con un trapo antipelusas o con una toalla de papel absorbente. Peina los pelos de nuevo hasta que formen todos una banda recta y plana. Haz un nudo con el hilo para asegurar el extremo "libre" de los pelos.

Pasa los pelos a la tuerca, incluyendo un margen adicional para los que serán colocados dentro. Usa la sujeción de rana como guía. Quita el nudo deslizante hecho en el paso cuatro y ata los extremos como en el paso dos.

Desliza la banda metálica de la rana alrededor de los pelos, manteniéndolos planos y paralelos.

Pon el nudo de pelo dentro del canal en la tuerca, enrollado alrededor de la cuña de la virola. Vuelve a colocar el deslizamiento. Con los pelos hilados a través de la banda metálica, vuelve a unir ésta a la tuerca. Inserta la cuña de la virola para que los pelos permanezcan planos y paralelos.

Vuelve a unir el tornillo del extremo a la varilla. Gíralo para ajustar la tensión de los pelos del arco, asegurándote de que la cámara esté bien cóncava a la mitad del arco. Pon resina en los pelos.

Consejos

Asegúrate de que la varilla permanece ligeramente doblada y cóncava. Mantén los arcos en el mejor estado posible colocándolo siempre en la funda del violín (o del arco) cuando no lo uses y sin excederte al apretarlo. Conoce tu arco, y si es posible, ten más de uno por si tienes que repararlo. La cámara (doblez) de la varilla nunca debería ser convexa. A los arcos se les debería poner más pelo periódicamente (con más frecuencia si se usa como parte de un mantenimiento general adecuado del instrumento). Para problemas de reparación del arco más serios, como roturas o grietas en la madera, por ejemplo, confía siempre en un luthier profesional.

Advertencias

Una reparación de arco adecuada requiere mucha práctica y tiempo. Los pasos aquí son los básicos... los luthiers profesionales y los diseñadores de arcos pueden tener "trucos de oficio" y un estilo propio para volver a poner el pelo. No practiques con un "buen arco", uno vintage, o cualquier arco que no pueda ser "sacrificado". Siempre es mejor llevar el arco a un luthier profesional o a un aprendiz para poder aprender cómo hacerlo bien. Hacer una pobre reparación puede terminar costándote más que los suministros iniciales y las herramientas necesarias, ya que el arco tendrá que ser llevado a un profesional entrenado para reparar la "reparación".

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