Cómo restaurar cántaras de leche viejas

Las cántaras de leche viejas son fáciles de conseguir y lucen fantásticas con muchos tipos de decoraciones. Pueden utilizarse como adorno, como mesita auxiliar, o de muchas otras maneras. Si encuentras una cántara sucia o polvorienta en una tienda de antigüedades, puedes llevarla a tu casa y restaurarla en breve tiempo. Solo hace falta un poco de pintura y de esfuerzo físico, y tendrás un gran accesorio para tu hogar. Acá sabrás cómo hacerlo.

Sección 1

Lija la cántara con un papel de grano fino para alisar cualquier imperfección o suciedad difícil que se pueda haber acumulado con el paso de los años.

Lava la cántara con agua y un poco de jabón lavavajillas o detergente. Asegúrate de llegar a las hendiduras para poder comenzar con una superficie totalmente limpia. Déjala secar.

Si la cántara tiene inscripciones, observa lo que dice. La mayoría de ellas tienen sellados nombres de empresas al costado. Anota lo que dice de modo que puedas restaurar dicho nombre con pintura para lograr un aspecto auténtico una vez que hayas vuelto a pintar la cántara.

Dale una mano de pintura fresca. La mayoría de las cántaras de leche son de plata, negras o blancas, pero si quieres, puedes pintarla de otro color. Déjala secar durante al menos dos horas y luego aplícale otra mano de pintura y déjala secar nuevamente.

Usando un pincel pequeño, sigue las hendiduras y vuelve a pintar el nombre de la compañía o de la granja impreso sobre la cántara. Utiliza un color que contraste con el de ésta, de modo que resalte la inscripción. Deja secar la pintura.

Dale a la cántara una capa fina de barniz para que resista el uso diario y se mantenga brillante y auténtica. Déjala secar durante 24 horas antes de usar.